Alemania, Holanda, Austria Finlandia, y otros países ricos del norte de Europa niegan la ayuda incondicional que pide España, argumentando que, un país que tiene más coches oficiales que el resto de Europa y E.E.U.U. juntos y que tiene más políticos a sueldo del Estado que Gran Bretaña, Francia y Alemania juntos, debería a cambio de las ayudas que necesita, someterse a ajustes que la fortalezcan como nación y que acaben con el despilfarro, la corrupción y el abuso de poder, tres males que hacen de España una falsa Democracia podrida dentro de La Unión Europea.
Somos un país con mucha impunidad hacia la corrupción. Ha habido mucha tolerancia desde las altas esferas, especialmente para la gente que tiene más poder, porque tiene más posibilidad de escapar de las normas
El Banco Mundial define la corrupción como el abuso de poder para beneficio privado. "Normalmente identificamos la corrupción jurídicamente perseguible -soborno, malversación, cohecho...- pero hay otra más sofisticada y compleja de la que no hay casi información en España", en referencia a la financiación de los partidos y la influencia de grupos de presión a la hora de elaborar leyes y marcar políticas.
Haría falta sin lugar a dudas un pacto nacional contra la corrupción y una serie de medidas básicas: reducir el poder de los partidos políticos y hacerlos más responsable frente a los ciudadanos, reducir la politización de la Justicia, mejorar la labor del Tribunal de Cuentas, establecer un sistema de denuncias...
La corrupción actúa como un impuesto regresivo, y castiga a los ciudadanos más pobres y a las empresas más pequeñas
Sea como fuere, la corrupción es política y afecta a esenciales centros de decisiones de poder. El daño político, ético y económico, y a la moral social ya está hecho y nadie parece aprestarse a poner el cascabel al gato.
Ahora nos sorprende que Europa nos ponga pegas para prestarnos dinero para salir de esta nueva crisis, pero lo cierto es que ya nos conocen y nos tienen tomadas las medidas, y parte de la culpa es nuestra, ya que no reaccionamos de ninguna de las maneras.
Deberíamos empezar a exigir fuertes medidas contra la corrupción, exigiendo que los corruptos respondan con todos sus bienes patrimoniales y pagaran sus delitos de forma integra con cárcel.
Exigir nuevas normas y formas políticas para marcar y restringir los salarios de los que nos gobiernan, terminar con el abuso del coladero de asesores, amiguismo y demás chupopteros, anulando las dietas, los coches oficiales y las pensiones vitalicias.
Se ha de hacer una criba de instituciones que solo sirven para colocar a la excedencia de políticos que no caben en primera linea gubernamental, empezando por las Diputaciones, los Consejos Comarcales...
Exigir que se someta a referéndum urgente la continuidad de la monarquía y la excepción de impuestos a la iglesia, cargas innecesarias para las arcas públicas que no aportan contraprestaciones a la ciudadanía que los mantiene por mediación de sus impuestos.
Tendríamos que empezar a demostrar al resto de Europa, que España es un país serio y trasparente, siendo los primeros en perseguir los delitos fiscales dentro y fuera de nuestras fronteras exigiendo al resto de Europa el que se acabe con los paraísos fiscales,teniendo una justicia ejemplar al servicio del pueblo, no al servicio del poder.
Deberíamos pedir de forma contundente, que por ley, se vincule el programa electoral que presentan los diferentes partidos en época de elecciones, a la permanencia en el gobierno. El programa a de ser vinculante para que en caso de incumplimiento del mismo, sea motivo automático de expulsión del gobierno de quien lo incumpla.
DEBERÍAMOS ESTAR POR LA LABOR DE TERMINAR CON TANTA MIERDA QUE ESCONDE BAJO LAS ALFOMBRAS ESTE PAÍS REFERENTE DE CORRUPCIÓN DE TODA EUROPA.
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